Logo

#AhoraSuena:
Dir. Ricardo del Conde

Miren que ahora sí me vine a meter en un gran lío, pues escribir acerca de un documental sobre la siembra y el cultivo del arroz, en el estado de Morelos, suena a pan con mermelada, pero cuando te fijas bien y te sumerges, vas descubriendo circunstancias y emociones con las que, una de dos: o te identificas o te identificas, y no hay más.

Da mucho gusto conocerlas o identificarse con las aves, pero cuando comprendes la responsabilidad del hambre y sus límites, cuando las alas se convierten en aliadas del escape, mira que ahí se viene el gran conflicto, en un instante me resulta impresionante cómo un chicotazo es detonador de una parvada, al siguiente comprendo que no todo aquél que te impulsa a volar está contigo.

Ricardo del Conde, director de Espantapájaros, nos presenta al temperico, un ave con “rayitas en la cabeza, como diablo”, que se alimenta de las siembras en los campos y cuyo comportamiento se asemeja al de las amistades que quizás ya muchos hemos enterrado en el camino, ¿cuáles amistades?, sencillo, esas pinches amistades de cagada (así me enseñaron que se llaman y no hay disculpas pa´ los agraviados) que se sientan a tu lado y te abrazan mientras se siembras, es decir, mientras encuentran en ti algo que cosechar, cuando no, ni se te acercan, así es el temperico: convenenciero y cabrón. Nota: cualquier semejanza con la realidad, es mera coincidencia.

Pero bueno, volviendo al tema de las cosas que valen la pena mencionar, me deja encantado cómo “El Sapo”, narrador y protagonista central de esta historia, nos da cátedra, literal y figurativamente, de cómo se tiene que alimentar al agua y a la tierra, antes de esperar que nos ofrezca alguna de sus tantas bendiciones, mientras los otros se quedan sentados mirando cómo la vida se les escapa de las manos, como el humo. ¡Chulada, me cae!

Acá, entre la pobreza, también existe el hambre, la muerte y la orfandad, exactamente eso, y pluralizo porque a veces no nos damos cuenta qué tan pobres somos ni qué tanto nos está llevando la chingada y nos atrevemos a juzgar por la apariencia, la situación o hasta por la región a nuestros semejantes, a quienes más bien yo nombro mis iguales. A todos se nos ha muerto la madre, a todos se nos ha largado el padre, ¿y qué con eso?, cada uno de los huérfanos somos hermanos, somos nosotros mismos compartiendo nuestros duelos y nuestras soledades. Así nos hacemos familia. No nos queda más que chingarle para alimentar a los pequeños y ser felices contra el viento y la marea.

El chiste es no asumirnos como débiles, para así jamás rendirnos, para aprender a levantar una casa en una semana, a restaurarnos y reinventarnos a la mayor brevedad, aprendemos a volar, a hacer el amor en el aire, como las aves, a entender que a la tierra hay que amarla como a la mujer, hay que cuidarla, porque al final de todo, de ella nos alimentamos, porque en muchos de nosotros aún existe la maravillosa y fantástica creencia que cuando se encuentra el amor en los ojos de la pareja, uno se casa, engendra, y es precisamente ahí donde la vida comienza, en ese momento que parpadea en el cielo y que se disputa entre la perpetuidad del campo verde o la prontitud de la sequía que se apresura al no dar alimento ni a las aguas ni a la tierra, a causa del cansancio o el engaño, en cuyo caso, lo más digno es un adiós definitivo e instantáneo.

Y hay que seguir, seguir rascando en busca del oro, de los restos, en busca de gigantes, no quedarnos como pájaros en el alambre, como los millones de espectadores que se aferran a sus miedos y que siguen siendo perseguidos por la muerte, esperando que la vida cambie, sin darse cuenta que el mundo gira, pero la luna siempre está allá arriba, junto a sus estrellas, sobre nuestra Tierra.

¡Fíjate bien!, y quizás también te escapes de la muerte, quizás también de tu cosecha te alimentes, quizás también te entregues a la tierra, quizás también, si te has fijado bien, te espantes a las aves que intentan consumirte la existencia.

 

Próximas presentaciones del Espantapájaros:

Noviembre 2012

VIERNES 9 – DOCSDF – 19:00 h – Cinemex Insurgentes

SÁBADO 10 – 17:30 h – Jaima del Parque México

Espera la ruta de festivales en 2013

Info